En el post anterior sobre seguridad en piscinas de uso público entramos a detallar los aspectos principales atendidos en materia de diseño y operación de este tipo de instalaciones, basados en la norma UNE-EN 15288 específica para tal fin.
En este post vamos a analizar el segundo de los estándares europeos que atiende la seguridad en el diseño de las piscinas de uso público: La norma UNE-EN 13451- Equipamiento para piscinas establece los requisitos generales de seguridad y métodos de ensayo necesarios para los equipos instalados en piscinas de uso público. Este marco regulatorio es fundamental para garantizar la integridad de las instalaciones acuáticas y la seguridad de los usuarios.
La UNE-EN 13451 se divide en varias partes, abordando desde los aspectos generales hasta los requisitos específicos de seguridad para elementos como escaleras y barandillas, o dispositivos de entrada y salida de agua/aire. En este post, desglosaremos los puntos más relevantes de estas normativas.
Seguridad General en el Diseño de Equipos para Piscinas
La UNE-EN 13451-1 establece los parámetros generales de seguridad que deben cumplir todos los equipos instalados en piscinas de uso público, abarcando desde la integridad estructural de los materiales hasta la resistencia al deslizamiento de las superficies.
Uno de los aspectos fundamentales es la selección de los materiales. Estos deben ser duraderos, resistentes a la corrosión y adecuados para soportar un entorno acuático sin deteriorarse. El correcto mantenimiento de los equipos, así como la inspección regular, son esenciales para prolongar su vida útil y garantizar la seguridad de los usuarios.
Otro punto importante es la seguridad en las superficies, bordes y esquinas de los equipos. Los elementos deben diseñarse de manera que minimicen el riesgo de cortes o golpes, por lo que los bordes deben ser redondeados y las superficies antideslizantes. Además, se presta especial atención a la prevención de puntos de atrapamiento, aplastamiento y cizallamiento, que podrían suponer un peligro para los bañistas.
Equipamiento de Acceso: Escaleras y Barandillas
La segunda parte de la normativa, UNE-EN 13451-2, se enfoca en los requisitos de seguridad para escaleras, escalas y barandillas. Estos elementos son cruciales para garantizar un acceso seguro al agua, tanto para los usuarios como para el personal de mantenimiento.
Las escaleras y barandillas deben diseñarse para soportar el peso de los usuarios sin riesgo de fallo estructural. Además, es imprescindible que las superficies de estos equipos ofrezcan una alta resistencia al deslizamiento, especialmente en zonas donde los pies de los bañistas estarán mojados. La normativa también establece la necesidad de instrucciones de uso claras, facilitando así su correcto mantenimiento.
Dispositivos de Entrada y Salida de Agua/Aire
La tercera parte de la norma, UNE-EN 13451-3, aborda los requisitos específicos de seguridad para los dispositivos de entrada y salida de agua/aire, así como para los elementos de ocio acuático que utilizan estos sistemas.
El diseño de estos dispositivos debe garantizar que no existan riesgos asociados a la succión durante su funcionamiento, lo que podría causar accidentes graves. Para ello, la normativa especifica métodos de ensayo que deben aplicarse para comprobar la seguridad y eficiencia de estos dispositivos. Además, la documentación técnica debe estar actualizada y ser accesible para los responsables de las instalaciones, asegurando que se sigan las mejores prácticas en el mantenimiento y revisión de los equipos.
Mantenimiento y Supervisión Continua
De forma trasversal, uno de los aspectos clave de la UNE-EN 13451 es la necesidad de un mantenimiento adecuado y constante. La correcta instalación y la supervisión regular de los equipos permiten identificar y corregir posibles fallos antes de que se conviertan en un riesgo para los usuarios.
La normativa exige que los equipos cuenten con instrucciones claras de instalación y mantenimiento, así como que se lleven a cabo inspecciones periódicas para garantizar que siguen siendo seguros con el paso del tiempo. Además, es fundamental que los operarios responsables del mantenimiento y gestión de la piscina estén debidamente formados en el uso y revisión de los equipos.
No solo protege a los bañistas, sino que también asegura el buen funcionamiento y la longevidad de los equipos instalados. Con un mantenimiento adecuado y una gestión responsable, las piscinas públicas pueden ofrecer un entorno seguro y agradable para todos sus usuarios.
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